Comer por ansiedad: cuándo la comida es la solución y el problema

 En Psicología

¿Alguna vez has sentido que comes por ansiedad? El hecho de sentirnos ansiosos puede hacer que comamos más de la cuenta, hasta que literalmente nos duele la barriga. Lo peor, son las consecuencias, dado que luego tendemos a sentirnos mal, a arrepentirnos. ¿Cómo controlar esta situación?

Comer por ansiedad, un círculo vicioso muy peligroso

El problema de comer por ansiedad está completamente a la orden del día. Afecta a más personas de las que podríamos imaginar y dificulta mucho el llevar un estilo de vida saludable.

En el momento en el que se pierde el control, nuestro cuerpo puede jugarnos malas pasadas. El comer solamente por ansiedad es una de ellas y solo tiene efectos negativos para el cuerpo.

Sin bien es cierto que al momento puede que te sientas mejor, porque es una forma de llenar un vacío. Pero no es una solución, sino que es una forma de alargar el problema. ¿Por qué? Porque una persona puede comer por la ansiedad de verse mal en el espejo, pero si sigue comiendo se verá cada vez peor y la ansiedad también será cada vez mayor… Es un círculo vicioso muy peligroso.

La importancia de identificar este problema

El hecho de comer por ansiedad es algo que está totalmente a la orden del día. Claro que, no a todas las personas les ocurre con la misma frecuencia ni con los mismos resultados.

Esto es, hay personas que pueden sufrir ansiedad y que les dé por comer un día dado. Pero para otras es su día a día y no pueden frenar la ansiedad si no es con comida. Son grados diferentes, problemas similares pero en distintos puntos.

¿Cómo calmar la ansiedad?

La ansiedad se puede eliminar con ayuda profesional, pero también cambiando el estilo de vida. Por ejemplo:

  • Practica algún tipo de ejercicio: el hecho de hacer ejercicio es clave para luchar contra la ansiedad. Puede que al principio te cueste mucho o se te haga totalmente cuesta arriba, pero te ayudará a eliminar la ansiedad.
  • Trata de organizarte mejor: hay veces en las que comemos simplemente porque estamos agobiados, porque no podemos con todo ni damos a todo. Es algo totalmente normal y no todas las personas reaccionan de la misma manera. Intenta establecer una mejor organización.
  • Busca la forma de desconectar y estar entretenido: al estar ocupado haciendo cosas que te gustan y que te diviertes, no tendrás ansiedad. Estarás mejor y no entrarás en el peligroso círculo de comer por ansiedad.

¿Qué comer para no sentirnos peor?

Aparte de tener en cuenta los consejos que te damos para aliviar la ansiedad que te lleva a comer, también puedes optar por ciertos alimentos saludables y que no engorden. De esta forma, conseguirás calmar la ansiedad sin verte luego peor.

  • Ensaladas: la ensalada, al no engordar, vas a poder comer tanta como quieras. Es una forma de “matar” la ansiedad, porque te mantendrás entretenido y comiendo sin entrar en la rueda de ganar peso y que ese problema te genere más ansiedad.
  • Chupa chups, caramelos o chicles sin azúcar: es el remedio clásico de los ex fumadores para recuperar su libertad y su salud. Optar por este tipo de snacks sin azúcar te ayudará a mantenerte entretenido y sin comer algo peor.
  • Fruta: comer una fruta como una manzana te ayudará a saciar el hambre y a controlar la ansiedad, porque lo mantendrás más a raya.
  • Agua o café descafeinado con hielo: también puedes optar por hidratarte mucho y tener siempre a mano un vaso de agua o un café con hielo, mejor descafeinado para evitar que se te alteren las pulsaciones.

¿Cómo salir de este bucle? Con ayuda profesional

El hecho de comer por ansiedad es un problema importante y puede tener consecuencias fatales para tu salud, a corto y a largo plazo. Por ello, es importante ponerle remedio y combatirlo. ¿Cómo? Con ayuda de un psicólogo.

Puedes curarte. Te ayudamos.

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